Las revoluciones de 1848

En 1848 una nueva oleada revolucionaria conmueve a Europa con mayor intensidad que en 1830. Con la excepción de Rusia, Inglaterra, Bélgica y Holanda, las otras naciones se vieron conmovidas. Señalamos que los movimientos más importantes ocurrieron en Francia, Estados alemanes, Estados italianos e Imperio Austríaco. Además del liberalismo y el nacionalismo, aparece en escena la clase obrera que, siguiendo proyectos radicales o socialistas, actuó con cierta independencia.

«La crisis económica y la crisis social que vive Europa, provocan tensiones que estallan en 1848.

A partir de algunos movimientos esporádicos de sectores populares con los que se confunde la burguesía en ascenso, la situación se generaliza en ese año y se expande por todo el continente: Sicilia, Francia, Alemania, Bélgica, Austria. Sólo Inglaterra queda en cierta medida al margen. En esps años los cartistas hacen su última presentación al parlamento. De todos los países es en Francia donde la situación se hace más compleja e influye sobre los procesos posteriores con más fuerzas.

En febrero de 1848, los grupos burgueses republicanos y los grupos obreros socialistas, provocan la caída de la monarquía. Luis Felipe huye y el poder queda en manos de estos sectores...».

«Se establece el gobierno provisional. Surge entonces una nueva situación. Se plantea desde ese momento, febrero de 1848, una dualidad en el poder. Los burgueses republicanos proponen una política moderada y se oponen a las reivindicaciones obreras. Los obreros socialistas quieren medidas sociales que van contra los intereses de esa misma burguesía. La actitud moderada de la burguesía se muestra desde el primer momento, cuando se resiste a declarar la Constitución de la República...». (Alberto J. Pía, «Historia del movimiento obrero», 1).

Esta situación enfrenta a los obreros contra la burguesía, no solamente en proyectos políticos: también los enfrenta en proyectos socio-culturales.

Las visiones de Blanc, Blanqui, Proudhon, Marx, no encuentran puntos de encuentro, mientras los líderes burgueses encontraron al general Cavaignac que, frente al ejército, desbarató todas las barricadas callejeras de los obreros utilizando la artillería. Después de este triunfo el gobierno restringió las libertades y derogó derechos.

El ciclo se cerró con elecciones presidenciales, luego de aprobada una nueva Constitución. Triunfó Luis Napoleón Bonapar-te, sobrino del emperador.